El SNI un ejemplo de la desigualdad de género

*Del total 7 de cada 10 son hombres.

Patricia Chandomí.- En el marco de la Reunión Nacional de Universidades Públicas “Caminos para la Equidad de Género en las Instituciones de Educación Superior”, la directora del Instituto Nacional de las Mujeres, Roció Gaytán expresó que la inequidad de género se demuestra en el Sistema Nacional de Investigadores, donde de acuerdo a datos del propio Sistema en 2009, del total de candidatos en los tres niveles, las mujeres alcanzan el 32.9 por ciento contra el 67.1 porciento de los hombres.
La mayor disparidad se da en el nivel tres, donde las mujeres alcanzan sólo un 18.8 por ciento y los hombres 81.2 por ciento.
Otro ejemplo, citado por la funcionaria es la feminización de las carreras, lo cual significa que las mujeres tienen mayor presencia en actividades como administración, humanidades y ciencias sociales, mientras que los hombres más en las ciencias agropecuarias, derecho, ingenierías y educación tecnológica.
Manifestó que es una tendencia que se encuentra a nivel nacional, por lo que se debe trabajar para disminuirla, erradicando estereotipos en la elección de carreras y alentandola orientación vocacional en cada persona desde los niveles de educación básica y conmayor énfasis en el nivel medio superior.
García Gaytán explicó que gran parte de esta disparidad se debe a que las mujeres interrumpen su ascenso a los diferentes niveles por razones de matrimonio y maternidad, mientras que los hombres no interrumpen su promoción por estas mismas razones.
Un tercer aspecto que se tiene que abatir con políticas públicas en las instituciones de educación superior, dijo, es la escasez de guarderías tanto para mujeres estudiantes como para las trabajadoras universitarias, quienes en muchas ocasiones, por no tener ayuda para cuidados maternos, ven truncados sus estudios.
Sin embargo, dijo, estos espacios, que han costado mucho trabajo crearlos y que es necesario fortalecerlos en infraestructura y presupuesto, deben ser alentados para que impacten en los programas universitarios de estudio, así como en la transformación de las relaciones de género al interior de la política académica y administrativa de lasinstituciones de educación superior.
La presidenta del INMUJERES manifestó que para avanzar en este sentido, las accionespositivas en las universidades deben ser una prioridad de las políticas educativas, presupuestales, de enseñanza e investigación.