Patricia Chandomí.- Yara Fernández la ecologista que pasara a la historia al convertirse en el 2003, en la primera mujer de Chiapas que denunciara ser víctima de acoso sexual de parte de su jefe, ahora vive un segundo hostigamiento laboral por tener “un expediente muy choncho” de lucha tanto en defensa de Reservas ecológicas como en organización sindical.
La doctora y férrea defensora de la Reserva Ecológica El Zapotal de Tuxtla Gutiérrez pecisó que el 20 de febrero dos personas que dijeron ser enviados del Jefe de la Zona Militar Núm. 14 de la capital chiapaneca cuestionaron a niños que recibirían un taller sabatino sobre Ecología con ella.
Los presuntos enviados militares hicieron preguntas de quién la acompañaba, por dónde se iba y cuestiones al respecto.
El 23 y 24 de febrero fue amenazada de despido por Jaime Magdalena Rodríguez, director de investigación del Instituto de Historia Natural (IHN) su centro de trabajo, porque según los jefes, Lourdes López Moreno y Froilán Esquinca Cano, la doctora cuenta con lo que ellos llamaron un “expediente choncho”.
El 16 de marzo se había girado la orden de no permitirle el acceso al Zoológico Miguel Álvarez del Toro, dentro de la Reserva Ecológica El Zapotal, sin embargo, el policía privado no acató la orden, por esta acción, el joven fue encarcelados dos días por supuesto “narcomenudeo” fue liberado tras pagar una cuota de extorsión de 6 mil pesos.
Yara Fernández fue la mujer que en el 2003 interpuso en la Procuraduría General de Justicia una denuncia en contra del maestro Eduardo Morales Pérez en ese entonces director de Investigación del IHN, la doctora presentó como pruebas audio-cassette que luego la dependencia hizo perdidizos.
En diciembre del 2007 solicitó el registro del Sindicato Independiente de trabajadores del Zoológico Miguel Álvarez del Toro antela Junta de Conciliación y Arbitraje de inmediato la directora del IHN la amenazó con correrla.
A la par Yara por apoyar a los colonos del Ejido Francisco I. Madero en la defensa de El Zapotal, donde se quiere construir zonas resindenciales fue objeto de persecución y amenazas de parte de su jefa, Lourdes López.
En enero de este año fue obligada con medidas coercitivas a salir de su oficina que tenía en el Zoológico desde 1991, por todo lo anterior, decenas de organizaciones civiles, de defensa de los derechos humanos así como investigadores y académicos piden que se emita cuanto antes una protección a Yara con medidas cautelares ante el clima de amenaza que pesa sobre ella.
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